Mirar al otro
Álbumes de México
Colección Ricardo B. Salinas Pliego
Desde su nacimiento, la fotografía se constituyó como una poderosa herramienta narrativa, ofreciendo una novedosa percepción del mundo y acceso a recónditos lugares a través de las impresiones fotográficas. Su veracidad asombró a propios y extraños, y se convirtió rápidamente en un medio cuya fácil reproducibilidad desató una irrefrenable proliferación de imágenes.
En un afán por administrar, ordenar, catalogar y organizar las innumerables imágenes producidas, y buscando la generación de relatos específicos, hace su aparición de manera inmediata el álbum fotográfico, que comienza a reunir compendios y colecciones de imágenes.
Estos libros, no de palabras sino de fotografías, cuentan historias tan diversas y originales en sus formatos, en sus técnicas fotográficas, en su organización y en su diseño, como en sus aspiraciones y necesidades. Cada álbum es una historia, desde el modesto e íntimo relato familiar que construye y sintetiza instantes de vida cotidiana, hasta ambiciosos proyectos de carácter científico, artístico o político, que abarcan una gran variedad de temas como arquitectura, urbanismo, comunicaciones, botánica, zoología, antropología, biología y efemérides, por mencionar solo algunos.
Estos compendios de imágenes nos ofrecen claves para reconstruir narrativas históricas, al proporcionar evidencia visual de eventos y contextos específicos; son testimonios que hacen patente el importante papel de las imágenes en la historia.
Mirar al otro se centra en seis álbumes que abordan desde diferentes perspectivas el retrato de México y los mexicanos. Sean fotógrafos extranjeros o mexicanos quienes produjeron estos testimonios, merece la pena reflexionar sobre los modos de representación realistas o estereotipados que se manifiestan en estas imágenes. Podemos ver claramente cómo difieren entre sí las aproximaciones de los diversos autores, así como el fin mismo de las imágenes que conforman cada álbum.
Esta exposición de relatos fotográficos se complementa con la mirada de algunos miembros del Seminario de Cultura Mexicana, quienes dejaron plasmadas las reflexiones y emociones que suscitaron en ellos ciertas imágenes. Esta diversidad de voces abre el camino para que cada visitante genere a su vez su propio punto de vista.
Mauricio Maillé
Curador
Una mirada a la exposición
Liminar
“Coleccionar fotografías es coleccionar el mundo”, afirma Susan Sontag en su capital estudio Sobre la fotografía, de 1977. Y, entre otras cosas, añade: “las fotografías procuran pruebas”; “fotografiar es conferir importancia” y, citando a Émile Zola, “no se puede declarar que se ha visto algo en verdad hasta que se lo ha fotografiado”. Si bien esta última afirmación es un tanto arriesgada, no cabe duda que la mirada del fotógrafo a través de la lente es, desde mediados del diecinueve, una de las maneras más logradas de documentar la realidad.
Liminar
“Coleccionar fotografías es coleccionar el mundo”, afirma Susan Sontag en su capital estudio Sobre la fotografía, de 1977. Y, entre otras cosas, añade: “las fotografías procuran pruebas”; “fotografiar es conferir importancia” y, citando a Émile Zola, “no se puede declarar que se ha visto algo en verdad hasta que se lo ha fotografiado”. Si bien esta última afirmación es un tanto arriesgada, no cabe duda que la mirada del fotógrafo a través de la lente es, desde mediados del diecinueve, una de las maneras más logradas de documentar la realidad.
Por su parte, el historiador del arte Erwin Panofsky nos enseñó que la distinción entre un monumento artístico y un documento histórico no es tajante ni estática. Las imágenes contenidas en los seis álbumes fotográficos que integran la muestra Mirar al otro. Álbumes de México —provenientes de la Colección de Ricardo B. Salinas Pliego— son monumentos estéticos de primerísima calidad y, a la par, documentos históricos de gran relevancia: las vistas estereoscópicas del México de hace cien años, la exquisita carpeta mexicana de 1940 de Paul Strand, el álbum decimonónico de tipos mexicanos de Cruces y Campa, la inusitada exploración científica de la región tarahumara hecha por Carl Lumholtz, las imágenes jalicienses de José María Lupercio y la extraordinaria serie mexicana de C. B. Waite (estos tres álbumes son de comienzos del siglo pasado) reclaman la atención de nuestra propia mirada para interpretar el pasado que nos concierne.
En su momento, los fotógrafos miraron la alteridad y la fijaron en imágenes de altísimo valor; ahora, varios miembros titulares del Seminario de Cultura Mexicana las han interpretado, a partir de su propia sensibilidad, con sus comentarios y reflexiones. Naturalmente, es motivo de celebración contar con la densidad intelectual de este distinguido grupo que representa la mirada del otro desde la pluralidad de las distintas ramas del conocimiento. Y, por supuesto, la exposición implica también nuevas miradas interpretativas de los otros: las de cada uno de los espectadores.
Al final, otra máxima de Susan Sontag: “muchos, mediante las fotografías, han descubierto la belleza”. Hago votos por que, a través de Mirar al otro, así sea.
Sergio Vela
Director general de Arte & Cultura del Centro Ricardo B. Salinas Pliego
Miembro titular del Seminario de Cultura Mexicana